La palabra

Querido diario,

La palabra dicha o escrita que sea tiene un poder fuerte. Os puede emocionar, o tal vez simplemente hacer pensar. Reflexionar sobre las cosas que nos rodean, sobre nosotros mismos. Las palabras unidas que forman una expresión, un dicho particular que puede golpearnos hasta el profundo del nuestro corazón. Una historia interesante, o puede ser un libro. Hay siempre palabras, miles, millones de voces unidas que forman la nuestra vida. Las palabras que digamos o que nos dicen. Las palabras del mundo que llegan al nuestro oído caminando por las calles.

¡Quien sabe cuantas palabras nos llegan en una vida! ¿Cuantas de esas palabras recordamos el día, el mes, el año después? Pocas, puede ser ninguna. Tal vez todas. Nos olvidamos de los gritos, de las palabras que nos hacen sufrir. Hay personas que las recuerdan a pesar de todo. Las personas que no son capaces de perdonar. Depende, pero, de la intensidad de la palabra que nos lastima. A veces es posible perdonar, pero no olvidar. Seguir adelante aun nos duele.

Las palabras que recordamos más son las que nos hacen sentir bien, que nos calman. Positivas, felices, vibran en la nuestra alma y nos hacen sonreír todo el tiempo. En un presente en cual las noticias que nos sobran no son tan positivas, leer, escuchar algo bueno, es una necesidad.

Estoy harta de toda esta negatividad que nos llega de día a día. Es el tiempo de paz, calma absoluta. El tiempo de las palabras que nos serenan, animan. Las palabras cómo alegría, esperanza, felicidad. ¿Pido mucho?

¡Buenas noches, mundo! ¡Que sean felices!